BATALLA DE ZARAGOZA, GUERRA DE SUCESIÓN ESPAÑOLA, por Alfredo Pastor Ugena, Catedrático y Doctor en Historia

Batalla de Zaragoza. Kunsthistorisches Museum. Viena La batalla de Zaragoza o batalla del monte Torrero se libró el 20 de agosto de 1710 en el marco de la Guerra de Sucesión Española. Derrota de los partidarios del duque de Anjuo que dejó libre el camino de Madrid al pretendiente Carlos. Con la ayuda de un molinero del lugar, Felipe V logró escapar de la captura disfrazado de soldado raso. Una de las singularidades de esta batalla es que ambos pretendientes estuvieron presentes en la misma y aunque no participaron directamente en la confrontación, su integridad se vio comprometida por la proximidad de la acción. También es significativa la pluralidad aludida de procedencias de las tropas participantes en el enfrentamiento

La Guerra de Sucesión Española (1700-1713) cambió los destinos de España tras la muerte sin sucesión de Carlos II, el último rey de la Casa de Austria. Fue una guerra civil e internacional cuyo principal resultado fue la entronización en nuestro País de la dinastía francesa de Borbón ,en la figura de Felipe de Anjou, -posteriormente Felipe V- a la que pertenece nuestro rey actual Juan Carlos I.

Felipe V de Borbón, llamado el Animoso (Versalles, 19 de diciembre de 1683Madrid, 9 de julio de 1746), fue rey de España desde el 15 de noviembre de 1700 hasta su muerte. Fue el sucesor del último monarca Habsburgo de España, su tío-abuelo Carlos II, y primer monarca de la dinastía Borbón. Su reinado duró 45 años y 3 días (en dos periodos separados) es el más dilatado de la monarquía hispánica.

Carlos II, que murió sin descendencia directa le nombró heredero (entonces el rey francés Luis XIV le dijo a su nieto: “Pórtate bien en España, que es tu primer deber ahora, pero recuerda que naciste en Francia, para mantener la unión entre nuestras dos naciones es la manera de hacerlos felices y preservar la paz de Europa”). Y, a su muerte en 1700, el duque de Anjou subía al trono con el nombre de Felipe V. Pero la proclamación de rey de España no fue asumida por Austria que consideraba más legítimos los derechos al trono de su archiduque Carlos (segundo hijo del rey Leopoldo de Austria) lo que provocó un enfrentamiento entre el emperador de Austria y el rey de Francia Luis XIV.

En 1701 mientras Felipe V juraba ante las Cortes castellanas, Inglaterra, Holanda, Dinamarca y algunos príncipes alemanes se alineaban por la Paz o Alianza de la Haya junto a Austria y en contra de Francia (temerosos de la posible unión de las coronas francesa y española en un solo trono), partidaria de que el duque de Anjou heredara la corona española y no el archiduque Carlos de Austria, lo que condujo a la Guerra de Sucesión Española; más tarde Portugal y Saboya se alinearían con los aliados y también. los estados miembros de la Corona de Aragón.

Retrato de Felipe V, 1739 por el pintor francés Louis Michel Vanloo, Museo del Prado de Madrid.

La Guerra de Sucesión española enfrentó a las grandes potencias europeas del momento (Francia y Austria) con sus respectivos aliados para dirimir el liderazgo de Europa, siendo Zaragoza uno de sus escenarios más importantes. En  España,  la  confrontación  adquirió  tintes  de  guerra  civil  ya  que  los  estados dela Coronade Aragón (Aragón, Valencia, Cataluña y Mallorca) respaldaron la candidatura austracista mientrasla Coronade Castilla aceptaba la borbónica.

El 20 de Agosto de 1710 se libró a las puertas de Zaragoza una batalla de crucial importancia: las tropas borbónicas fueron derrotadas y el  Archiduque  Carlos restituyó todos los  fueros y privilegios del  Reino de  Aragón, que habían sido revocados por Felipe V en 1707. Esa batalla, la última gran  victoria austracista enla Península Ibérica,  fue la llave que abrió el  efímero período de soberanía del archiduque Carlos y sus tropas.

Ahora hace 300 años que los ejércitos borbónico y aliado se encontraron a las puertas de Zaragoza, en la única batalla dela Guerrade Sucesión que contó con la presencia física de ambos pretendientes.

Las tropas leales a Felipe V que habían sido derrotadas en la batalla de  Almenara el 27 de julio de 1710 abandonaron seguidamente Cataluña Su  comandante era el marqués de Bay.  Las tropas del bando contarrio estaban al mando del príncipe austriaco Starhemberg

En esta batalla de Zaragoza se enfrentaron 20.000 soldados de las tropas borbónicas  que, con Felipe V al frente, acamparon junto a la capital aragonesa, con la finalidad de reorganizarse Junto a las tropas francesas participaron soldados de la Corona de Castilla, algunos aragoneses, walones, italianos  e irlandeses.

Frente a ellos estaba el otro pretendiente al trono español, el Archiduque Carlos de Austria que desplegó  25.000 soldados de Castilla y principalmente de Aragón, junto con ingleses, alemanes, austriacos, portugueses, holandeses y franceses hugonotes.

Archiduque Carlos, Palacio Real de Madrid. En Viena, fue proclamado como rey de España con el nombre de Carlos III

Los dos ejércitos se dispusieron en una línea imaginaria desde el Monte de Torrero hasta las inmediaciones del actual barrio de las Fuentes. El día 20 de agosto amaneció con un enfrentamiento de artillería que duró hasta el mediodía..El desastre de las tropas de Felipe V fue completo. El ejército borbónico perdió 10.000 hombres entre muertos y heridos, y sufrió cerca de 5.000 prisioneros.

Como consecuencia de la batalla, el archiduque Carlos entró en Zaragoza el 21 de agosto, donde permaneció cinco días. Todo Aragón quedó bajo en control del archiduque Carlos. El 6 de septiembre entró triunfantes en Calatayud

. El día nueve, Felipe V y su familia abandonaron Madrid en medio del fervor popular, llegando a Valladolid el 16. El 28 de septiembre las tropas del pretendiente austriaco Carlos entraron en Madrid rodeados de la hostilidad general de la población.

El archiduque hizo éste su famoso comentario: «Esta ciudad es un desierto». Durante el invierno siguiente se vio obligado a salir finalmente de Madrid para enfrentarse a la contraofensiva francesa, la cual le reportó la primera derrota en Brihuega, siendo después vencido definitivamente en la batalla de Villaviciosa

En 1713 el Archiduque Carlos fue elegido emperador de Alemania. Las potencias europeas, temerosas ahora del excesivo poder de los Habsburgo, retiraron sus tropas y firmaron ese mismo año el Tratado de Utrecht, en los que España perdía sus posesiones en Europa y conservaba los territorios metropolitanos (a excepción Gibraltar y Menorca, que pasaron a Gran Bretaña) y de ultramar. No obstante, Felipe fue reconocido como legítimo rey de España por todos los países, con excepción del Emperador, que seguía reclamando el trono español.

. El logro fundamental, no obstante, fue el de la centralización y unificación administrativa y la creación de un Estado moderno, sin las dificultades que supusieran antes los reinos históricos de la Corona de Aragón, incorporados al sistema fiscal y con sus fueros y derecho público (no así el privado) abolidos con la aplicación de los Decretos de Nueva Planta. Se impuso una política centralista y España se gobernó desde Madrid.