100 AÑOS DE OCTAVIO PAZ, por Isidoro A. Gómez Montenegro
Desde que empecé a escribir poesía… Octavio Paz. En el prólogo Del arco y la lira, me pregunté si de veras valía la pena hacerlo, ¿No sería mejor transformar la vida en poesía?, que hacer poesía con la vida, la vida es importante en todos los ámbitos, la cuestión de los versos importa, como todo, es una cuestión vital. La vida se siente en el vértigo de caer por el borde del abismo. Pregunta si valió la pena, lo que si sabes es, que si te acordarás de todos tus textos, poesías y ensayos. Ahí estarás de nuevo, en la línea para volver a empezar, el agua se va entre las manos, hay un muro de silencio, de ortiga, cal y viento. Un extraño rayo de luz entra en mi habitación, no me calma el pensamiento, la almohada, las promesas quedaron suspendidas en el viento, no tenemos todo el tiempo.
Hermandad “soy hombre; duro poco y es enorme la noche. / Pero miro hacia arriba:/ las estrellas escriben./ Sin entender comprendo:/ también soy escritura/ y en este mismo instante/ alguien me deletrea”.
Una multitud grita mi nombre, me fumé los espejos de la India, los cantos de los vedas, esperaba encontrarte entre los segundos de mis años, alcancé a llegar a la selva de tus notas. Te sigo en las líneas de tus textos, no sé dónde detenerme, el río de tu ausencia y de tu sombra me congelan.
Abro mis ventanas trato de sentirme cerca de ti, de tu lenguaje, que es mero instrumento, extiende fronteras de lo real, sirve al mundo nuevo que espera trayectoria, aparece por acto de docilidad, servicio, exigencia de lo que el mundo pide.
Octavio Paz decía: “En un mundo de cojos, aquél que habla de la existencia de seres con dos piernas es un visionario, un hombre que no se separa, que evade la realidad, en este caso el artista, el poeta tiene en su contra tanto al intelectual comprometido, como al tendero de la esquina y así mismo. En cuanto perciben o proponen teorías que reducen; desprecian la naturaleza práctica.
Octavio Paz, nace en México el 31 de marzo de 1914, fue becario en Estados Unidos, estudia poesía hispanoamericana. En 1963 obtuvo el Premio Internacional de poesía, en el sexto Congreso Internacional en Knokke, Bélgica, compitiendo con poetas de todo el mundo. Premio Nobel de Literatura en 1990. Premio Nacional de Periodismo en 1998, en este mismo año muere rodeado de sus amigos intelectuales y del Presidente Ernesto Zedillo, antes había expresado su preocupación por el país, su país solar, pero también oscuro, por los jóvenes, por la promesa que representan y las rotaciones de la vida, muere el 19 de abril de 1998.
Gran poeta, escritor, ensayista, destacado intelectual del siglo XX, precisamente en abril de 1998 me encontraba en México por cuestiones de salud, antes de desayunar, me sorprendió ver los periódicos, daban la noticia de su fallecimiento, compré el diario y rápidamente regresé al hospedaje para ver las noticias por televisión.
Me interesaron sus ensayos, más que nada sus poemas, El presente es perpetuo que se encuentra en Ladera (1965) dedicado a su esposa Marie José, que conoció en Nueva Delhi, India en 1962.
Una muchacha real entre las casa y la gente espectral/ presencia, chorro de evidencias/ yo vi a través de mis actos, la tomé de las manos/ juntos atravesamos los cuatro espacios, los tres tiempos/ pueblos errantes de reflejos/ y volvimos al día del comienzo/ el presente es perpetuo. 21 de junio.
Paz, inició muy joven su actividad literaria en la Revista Barandal en 1931-32, Cuadernos del Valle de México 1933-34, en 1937 viajó a España, estuvo en Madrid, en Valencia.
A su regreso dirigió Taller en 1938 y tomó parte en la formación del Hijo prodigo en 1943. Vivió en Estados Unidos y en 1945 ingresó al Servicio Exterior mexicano, residió en Paris y participó en el Movimiento Surrealista del que no cesó de tener contacto, viajó a Oriente, India y Japón en 1952.
En 1957 recibe el Premio Xavier Villaurrutia. Al volver a México fundó junto con Juan Soriano, Leonora Carrington y otros el grupo Poesía en Voz Alta, en el que se iniciaron jóvenes dramaturgos y directores, Emmanuel Carballo, Juan José Gurrola, José Luis Ibáñez, Héctor Mendoza.
Durante ese tiempo publicó ensayos sobre poetas y pintores mexicanos: Tamayo, Coronel, Montes de Oca, Soriano, se mantuvo en defensa del Arte Contemporáneo, atacado por los defensores del realismo socialista y en 1962 reside en India como Embajador de México. Ganó El Premio Nacional de Literatura en 1977.
Fue nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional Autónoma de México en 1978 y Doctor Honoris Causa por la Universidad de Harvard 1980[
Ahí quiero situarme, cuando conoce a la que fue su esposa por 30 años Marie José Tramini, ella narra cómo conoce al poeta, Marie tiene más tiempo de radicar en India, se conocen en el barrio de Junder Najar en Nueva Delhi en la Orden de Party, en una fiesta, era la hora luminosa, que transforma los objetos.
Una tarde de India, trasfigura a la gente y hace tangible el instante, de ahí en adelante se vieron con mayor frecuencia entre diplomáticos e intelectuales, se comunicaban en francés y español, él la llama de cariño Marilló, ella se dedicó más de 10 años a las Artes plásticas, el collage, exhibió su obra en 1990.
Para Paz el poema es: Lo que pretende decir el poeta, no antes del poema, sino después de hacerlo y no siempre lo consigue, por eso cada poema es el borrador del siguiente.
Octavio Paz al referirse a la creación de Piedra del Sol señala: “No tenía plan, no sabía lo que quería escribir. “Piedra del Sol” se inició como un automatismo. Las primeras estrofas las escribí como si literalmente alguien me las dictara”.
En India se considera que las fases de la luna dictan silabas distintas a medida que recorre las mansiones del cielo. Cada posición se asocia con una sílaba, a la hora del nacimiento se elige esta sílaba como base del nombre del nuevo ser.
Por eso en la cultura hindú saber el nombre es saber el nacimiento, un minuto de reloj es igual a una respiración, las medidas silábicas penetran los misterios del flujo temporal, lo calibran más allá de un mecánico tic-tac, tiene la capacidad de atrapar el fuego de la palabra en donde brota simultáneamente la imagen, el sentido y el silencio. Una respiración nombra una sílaba.
Panorama desolador, los que pensamos tratamos de entenderte, te apagaste como el día, deslumbraste como sol entre lirios fríos de rocío, damas te acompañan a la hora más pesada del sueño, arrojado, en quietud seguirás deslumbrando, con tus letras, como los árboles echaste ramas inalcanzables, más allá de lo esperado, te volviste símbolo, dijiste no a la camisa de fuerza, no al arte comprometido.
¡Si a la fraternidad entre los hombres, el pórtico abierto a la cultura japonesa con los haiku! Si bien los textos del maestro Octavio Paz se hacen más complejos a la mujer de aire y fuego dormida, desnuda, reflejo de la voluntad del hombre, con excepción de Sor Juana, el Maestro Paz y su eterna búsqueda de si, de otro lenguaje, en sus poemas exploró temas desconocidos.
Nos lega su obra: En ensayos. Revistas Plural y Vuelta. Libros: El mono gramático y Ladera Este, Viento entero y blanco, Obra poética (1935- 1998), El laberinto de la soledad 1950, El arco y la lira 1956, Las peras del olmo 1957, Cuadrivio 1965, Conjunciones y disyunciones 1969, Apariencia desnuda: la obra de Marcel Duchamp 1973, El signo y el garabato 1973, Los hijos del limo 1974, In/mediaciones 1979, Sor Juana Inés de la Cruz o Las trampas de la fe 1982, Sombras de obras 1983, Hombres en su siglo 1984, La otra voz, poesía y fin del siglo 1990, La llama doble 1993 y Vislumbres de la India 1995.
Rvista la alcazaba 53