BAKUNIN, FILÓSOFO DE LA EDUCACIÓN, por Carlos Humbreto Quintero Ríos
Los semidioses y los esclavos estarán humanizados, los primeros deberán descender un poco de su altura y los otros se elevarán mucho” – Bakunin
Cuando se hace referencia a Mijaíl Bakunin en temáticas pertinentes a los postulados, estudios y análisis de sus aportaciones dentro de los campos de la filosofía, la educación, la política e incluso de la economía; se establece indudablemente la leyenda fantástica de un personaje con una tremenda capacidad para armar en cualquier espacio donde se hiciera presente la generación de revuelos y polémicas entre sus adversarios, colegas, seguidores y discípulos. Sus aportaciones dentro del campo de la filosofía y la educación es una raíz trascendental para comprender sus máximas teorías tocantes al acercamiento de la noción de la libertad y el humanismo perfilados meramente por los términos de la ciencia. Términos en su complejidad respaldadas por el pérfil de la objetividad y el raciocinio.
Bakunin, propone el concepto de la libertad relacionada con el hombre: “El hombre sólo se convierte en hombre y llega a tener conciencia y a realizar su propia humanidad en la sociedad, gracias a la acción colectiva de toda la sociedad. Sólo se libera a sí mismo del yugo de la naturaleza externa por el trabajo colectivo y social”. Como se explica el hombre se emancipa no en relación con el yugo universal, sino que el hombre se libera a sí mismo y a lo que le rodea mediante el acercamiento a la noción de la ciencia y el ejercicio del trabajo, por ello se elimina la mala influencia de los hombres con el poder. Cabe mencionar que alcanzar el autodominio precisa comprender el significado de la palabra libertad, que según Bakunin se rige bajo: “El dominio sobre las cosas externas, basado en compañía de las leyes de la naturaleza”. Esto gracias a la ciencia, el trabajo, la rebelión política que será independiente de un medio social caótico y pretencioso de grandes feudales que desean equiparar la ganancia de la fuerza laboral por parte de los obreros.
El análisis a Bakunin es llegar a evitar la desolación que trae consigo la desgracia de la explotación, la pobreza, la inequidad y la falta de oportunidades en todos los ámbitos que se desee hacer mención, y el analfabetismo. El hombre necesita orientarse en los senderos de la educación, el origen del conocimiento para llegar a comprender su alrededor entorno a su contexto social y natural para equilibrar su entendimiento a las perspectivas que lo rigen tanto en las bases de las leyes determinadas y establecidas por parte de la sociedad (derechos y obligaciones fundamentadas en una carta magna) y las leyes naturales que moldean la realidad, así el yugo de la mano de los explotadores no causaría en absoluto ningún efecto.
Bakunin elimina la subsistencia en el vocabulario de una sociedad igualitaria. El vocablo subsistencia expresa meramente supervivencia con estruendos de coraje y dolor para salir adelante, a lo que se deduce luchar por obtener algo como último recurso para vivir, Bakunin (aunque suene con tonos útopicos) en su propuesta manifestaba una comunidad sinpobreza económica e intelectual. La guía para una sociedad igualitaria se circunscribe en la eliminación de privilegios por parte de los señores feudales en el sentido de elegir opciones para su bienestar en lo relacionado con lo político, económico, social y educativo.
Indudablemente Bakunin deseaba eliminar la fatalidad que daba por resultado la inmensa desproporción en el sentido de la falta de oportunidades, y Bakunin establece: “mientras los individuos al nacer no encuentren en la sociedad los mismos medios de vida, la misma educación, formación, trabajo y disfrute, la igualdad política, económica y social será imposible”. Y en efecto se sintetiza: ”Paz, emancipación y felicidad para los oprimidos. guerra contra todos los opresores y explotadores”.
La propuesta de Bakunin para poder llegar a la libertad y la justicia social en su práctica total y que rindiera frutos, era el de organizar a la comunidad por medio de votos y elegir de una manera libre y democrática una federación (de abajo arriba) de las asociaciones de trabajadores, industriales agrarias, cientifícas, literarias, primero con una pequeña comuna, y por último en una asociación internacional donde exista la retroalimentación para el mejor manejo de las sociedades logrando un mayor bienestar a nivel mundial. Sólo así en la plena luz del siglo XIX, se podría llevar a la praxis la igualdad de las clases socielas, sin distinción alguna, sin objeto de burlas y engaños por profetizar algún credo religioso. La eminente abolición de la sumisión.
“Mientras existan dos o más grados de educación para los diversos sectores de la sociedad, existirán inevitablemente las clases; es decir, los privilegios económicos y políticos para un pequeño número de gente afortunada, y la pobreza y esclavitud para la mayoría”. Se hace presición en una de las referencias de la crítica de Bakunin entorno a la esfera de la educación, el abismo existente dentro de la actividad muscular con la actividad nerviosa, lo distintivo entre la actividad manual y la intelectual, una grave falta que se palpa en el sistema pedagógico de su tiempo (y que aún persiste y causando estragos en las esferas de la sociedad internacional). La gravedad cabe destacar que se hace en relación petulante cuando la élite hace la referencia que el trabajo y la actividad manual son pertenecientes a la clase baja (obreros), y la actividad intelectual depende exclusivamente a los académicos, estudiosos y sabios.. Existe una gravedad al hacer esta deducción mmal fundamentada. Bakunin en su sistema pedagógico proponía que ambas se llevaran a la práctica en un modelo social, político y educativo para obtener seres con una mayor complejidad en sus ejercicios y actividades diarias, o sea que no sólo el aspecto manual fuera dominado ante la característica primordial del trabajador y el artesano o el ejercicio mental fuera exclusivo de los intelectuales. Bakunin proponía eliminar el atrofio que existía por parte de los trabajadores faltos en el ejercicio que realizaban los intelectuales (y viceversa), esto con el mero propósito de aumentar la calidad de vida que formaban parte del contexto histórico de la sociedad.
“Todos los hombres se unirán y marcharán con vigor renovado hacia nuevas conquistas en la ciencia y la vida”.