En el breve volumen, “Telas de araña”, el primero, y creemos que hasta ahora el único poemario publicado por su autora, del que tomamos esta muestra poética, confiesa Luz haber nacido una fría mañana de febrero en la estepa rusa de la provincia de Jaén: Santiago de la Espada y que después ha hecho un poco de todo. Así nos dirá haber aprendido arte dramático en la Escuela Superior de Córdoba y que como profesora de inglés ha descubierto su gran pasión por la enseñanza. Tras estas sus confesiones como profesora y artista, nosotros hemos oído, leído, visto y escuchado a quien hoy traemos a LA ALCAZABA en calidad de poeta joven, en otros mundos de la comunicación (sobre todo del Sur), tal son la radio, el periodismo y la televisión. Canal Sur y varias emisoras y diarios andaluces han sabido y saben de sus trabajos literarios e informativos. No en vano también puede afirmar y afirma que escribe desde su plena adolescencia, es decir, “desde que me compré mi primer bolígrafo bic”. Y esa juventud, esa adolescencia es la que, a través de unos temas y una palabra también joven, se reflejan en buena parte de su poesía.
PRIMERO UN GRILLO
De vez en cuando necesito el silencio
para hacer un caldo de verduras
y sentarme a olerlo.
Después regreso al asfalto
y con resistencia entro en un mundo
que me parece ajeno.
De vez en cuando bostezo, miro los tejados
y acaricio mi gata mientras pienso:
primero un grillo y después, un alcalde
PÁJAROS CON ALAS
Hace frío
y las palomas de los tejados
esconden su cabeza entre las plumas.
Sierra Mágina está cortada por una / inmensa
nube gris de invierno
y las amarillentas hojas de los árboles
esperan a que un solo soplo de viento / las tire.
Las antiguas antenas de los tejados / no dicen nada,
hacen de peldaño para que lo pájaros con / alas se posen
y levanten el vuelo.
Casi es Navidad.
Las tiendas tienen árboles de plástico en / sus escaparates
y las tarjetas de crédito salen y entran de / los cajeros.
Huele a café, a leña de olivo y a gasoil.
Estamos todos, y los que no están, en / silencio, con palabras,
dejan de vez en cuando una sonrisa.
Este momento es para envolverlo en / papel de celofán, y colgarlo
del jodido árbol de Navidad, o regalarlo / al primero que pase por la acera.
UN TROZO DE NADA
Aquí me quedo,
el aire es frío y ha venido
a traer un trozo de invierno.
Cierro mi ventana y todo parece
quieto frente al gris de la tarde.